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LONDRES, Ingleterra.- A primera vista resulta imposible, pero con unas cuántas copas de más se convierte en insólito. Una mujer casi pierde la vida al caer, completamente borracha, sobre un paraguas, que se incrustó en su nariz y le atravesó la boca.
Jessica Yates, de 22 años, había compartido una salida de chicas en Watford, Inglaterra, y a su regreso se cayó sobre la cama del hotel en el que se alojaban sin sospechar que perdería el equilibrio y terminaría en el piso, justo sobre el paraguas que unos minutos antes había empleado para guarecerse de la lluvia.
Según publicó el diario inglés Dailymail.co.uk, una amiga de Yates llamó a emergencias, quienes la llevaron a un hospital donde cortaron una parte del paraguas, pero le dejaron unos 15 centímetros dentro de la nariz, debido a la complejidad del cuadro.
Desde ahí fue trasladada a un segundo centro asistencial, donde le extirparon el resto tras una cirugía. "Estaba un poco borracha y no me di cuenta lo que había sucedido al principio. Pero, mientras me levantaba del suelo el paraguas se vino conmigo, pegado a mi cara. Ahí llevé mis dedos a la nariz y pude sentir el metal que sobresalía", explicó Yates al medio londinense.
"Por suerte había bebido tanto que no me dolió al principio, pero realmente no podía sentir mi cara. Fue un accidente realmente extravagante", comentó la encargada de un negocio de zapatos, que fue dada de alta al día siguiente con varios puntos de sutura.
"Tuvo suerte, de alguna manera.
Si se hubiera ido un centímetro más alto tendrían que haberme sometido a una operación reconstructiva facial. Estaban tan sorprendidos en el hospital me preguntaron si podían filmar y luego me dieron el resto del paraguas como recuerdo", resumió Yates.
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