Muerte: apuñalaron a un hombre en esquina céntrica


JUJUY
En medio de un confuso hecho, ocurrido ayer a la mañana, un hombre habría sido asesinado por el propietario de una relojería, tras una discusión y pelea que se habría originado en el interior del comercio ubicado sobre calle Güemes, casi esquina Necochea de esta ciudad.


 La muerte del sujeto mayor de edad fue confirmado por el propio fiscal de investigación penal Carlos Enrique Farfán, quien luego de llegar al lugar del hecho confirmó el crimen, como también la detención del propietario de la relojería, ubicada en Güemes Nº 803, a quien se le imputo la carátula de "homicidio simple".

 El aparente crimen, según testigos y comerciantes de la zona, ocurrió entre las 11 y 11.30 de ayer y las razones que habrían originado el sangriento homicidio para las investigaciones, hasta el cierre de esta edición, eran desconocidas. 

 En este sentido el titular de la Fiscalía de Investigación Penal 3, luego de confirmar el homicidio y la detención e imputación del relojero de apellido Cadenas, dijo que desconocía el móvil del crimen y que el arma homicida "aparentemente habría sido un vidrio".

 Paralelo a esto el fiscal señaló que ayer se iba a realizar la autopsia sobre el cuerpo del sujeto, que habría sido identificado como Juan Carlos Armella (55), y además aclaró que el menor de edad, quien al momento del sangriento hecho se encontraba junto a la víctima, había sido trasladado hasta la Seccional 1º y se encontraba bajo la tutela del Juzgado de Menores de turno.

 Se debe decir que el piso de la relojería "Rubí" se encontraba todo regado de sangre, al igual que la vereda, donde las grandes manchas del fluido rojo mostraban cual había sido el derrotero de la víctima, quien luego de resultar herido habría intentado trasladarse, pero debido a las graves heridas sufridas cayó sin vida a los pocos metros. 

 Por esta razón una de las hipótesis que se barajaban señalaba que todo se había originado en momentos que la víctima, junto al menor edad, habrían decidido sentarse en la ventana del comercio, provocando que el relojero se molestara y los recriminara con palabras subidas de tono por esa acción. 

 Esto habría provocado que la víctima contestara y enfrentara al relojero, suscitando una discusión en el interior de la relojería, que luego se transformó en una pelea física, donde se habrían roto vidrios.

 Al parecer, uno de esos pedazos fue tomado por el acusado para ultimar a la víctima, pero otra teoría indicaría que quedó herido en la zona del abdomen al golpear o caer contra los vidrios. 

 Otra versión de los hechos indica que la víctima habría llegado hasta ese comercio para cobrar una deuda que el relojero, aparentemente, mantenía con la víctima. Justamente este cobro habría hecho que ambos discutieran y se trenzaran en una pelea que finalizó con la muerte del supuesto cliente que murió casi instantáneamente.

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